Crédito foto: AFP
En el regreso a su hábitat natural, Rafael Nadal quería reescribir la historia del tenis. Uno de los mejores jugadores de polvo de ladrillo en la historia, buscaba su noveno título en fila en la tierra batida del Principado de Mónaco. Pero se encontró con el número uno del mundo, Novak Djokovic.
El Masters 1000 de Montecarlo tuvo una final de lujo, donde "Nole" destronó a "Rafa". Fue por 6-2 y 7-6 (contundente 7-1 en el tie-break). El "principe de Montecarlo" ahora es serbio.
Ya se habían cruzado en 2009 y 2012 en este torneo, donde se impuso el mallorquín. Inclusive el último antecedente era un punto alto a favor de “Rafa”. Hace un año ganó por un aplastante 6-3 y 6-1. Pero la historia cambió en esta edición 2013.
Djokovic terminó con la hegemonía que Nadal tenía en la superficie del Principado. De cara a Madrid, Roma y Roland Garros fue un buen ensayo para medir fuerzas. Es que el serbio se transformó en el único que venció a Nadal en tres finales en polvo de ladrillo.
Nadal no pudo batir un récord histórico que, por ahora, compartirá con el argentino Guillermo Vilas. La plusmarca de ocho certámenes idénticos consecutivos que “Rafa” posee con Montecarlo, “Willy” la tiene con el ATP de Buenos Aires.
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